Correa preocupado por una posible desestabilización del régimen

Solo ayer se posesionaron 124 asambleístas, 23 prefectos provinciales, 222 alcaldes, 1.581 concejales y 3.985 miembros de las juntas parroquiales, con cual despliegue democrático, el movimiento político del Presidente Correa se ha consolidado y hasta la misma Asamblea ahora goza de mayoría y el aval de Fernando Cordero.

Pero no todo son buenas noticias para el régimen que se ha dado en radicalizar la agenda del Socialismo del Siglo XXI, transformando ejes vitales en la vida social, económica y política del Ecuador. Está pendiente una gran transformación de la educación laica, solo vista en la época de Eloy Alfaro. Los servicios de salud son diferentes, la adjudicación de puestos públicos se hace por concurso abierto entre los aspirantes y se ha desendiosado a los medios de comunicación social, tan llamados el cuarto poder del estado.

Durante la cadena sabatina, en Puerto López, provincia de Manabí, Correa dejó entrever su preocupación porque según el presidente habrían intereses en querer desestabilizar el gobierno democrático en Ecuador. En sus propias palabras manifestó: Hay estudios de inteligencia que señalan que después de Zelaya soy yo.

Si creemos en las palabras del presidente Correa, existen razones para que todos los ecuatorianos se preocupen. Lo que a Zelaya le hicieron fue un golpismo y sus consecuencias no siquiera se conocen aún. Cuidado que entre las filas de los militares ecuatorianos hay políticos muy conocidos y representados.

Nota del editor: Quisimos recabar información del sitio de la presidencia [http://www.presidencia.gov.ec/], pero hasta el momento de la publiación el sitio no ha respondido o ha estado caído por alguna razón